ActualidadNovedades

Reciclaje químico: el futuro de la gestión de plásticos complejos

By 22 de diciembre de 2025No Comments

En un mundo que produce más de 400 millones de toneladas de plástico al año, el reciclaje químico abre nuevas oportunidades para abordar aquellos materiales que hoy no cuentan con soluciones eficientes. Esta tecnología se posiciona como una de las soluciones más innovadoras frente al creciente problema de los residuos plásticos, aportando a una mejor gestión y un avance hacia una economía circular alineada con el desarrollo sostenible.

¿Qué es el reciclaje químico?

Es una técnica avanzada que descompone los plásticos en sus componentes moleculares básicos, conocidos como monómeros, para transformarlos en nuevos productos. A diferencia del reciclaje convencional o mecánico, que derrite y remodela los materiales, este proceso permite su reutilización sin perder la calidad.

Gracias a este enfoque, es posible recuperar plásticos que han perdido sus propiedades o que no pueden reciclarse de forma tradicional, ampliando las alternativas de valorización de residuos dentro de un modelo circular.

¿Cómo funciona?

El proceso de reciclaje químico se basa en tres etapas clave:

  1. Descomposición Molecular: Los plásticos son descompuestos en sus monómeros originales.
  2. Reutilización: Estos monómeros se utilizan para crear nuevos productos sin perder sus propiedades.
  3. Cierre del Ciclo: Se promueve un ciclo de vida continuo para los plásticos, minimizando el desperdicio y reduciendo la dependencia de materiales vírgenes.

Reciclaje químico v/s reciclaje tradicional

A diferencia del reciclaje mecánico, el químico permite obtener materiales de alta calidad, comparables al plástico virgen, mientras que el método tradicional suele degradar el material con cada nuevo ciclo. Además, tiene la capacidad de procesar plásticos complejos, mezclados o contaminados que no son aptos para el reciclaje convencional.

Desde una mirada ambiental, también ofrece ventajas al reducir la necesidad de producir nuevos plásticos a partir de materias primas fósiles, contribuyendo a una gestión de residuos más eficiente y con menor impacto ambiental.

¿Qué plásticos puede tratar y cuáles son sus límites?

El reciclaje químico resulta especialmente útil para aquellos plásticos que presentan dificultades para el reciclaje tradicional. Entre ellos se encuentran los envases multicapa, los films plásticos, los materiales flexibles, los plásticos mezclados y aquellos contaminados con restos orgánicos o químicos, habituales en procesos industriales y logísticos.

Sin embargo, no es una solución universal. El reciclaje químico no reemplaza al reciclaje mecánico, sino que lo complementa, ya que uno es ideal para plásticos limpios y homogéneos, mientras que el otro entra en juego para “rescatar” los que no pueden ser recuperados por métodos convencionales.

Su aplicación depende del tipo de residuo, del nivel de contaminación y de la viabilidad técnica y económica del proceso. Por eso, su implementación debe evaluarse caso a caso, como parte de una estrategia integral de valorización de residuos y reducción en la generación de desechos.

Reciclaje químico y reciclaje mecánico: enfoques complementarios

El reciclaje químico no compite con el reciclaje mecánico, sino que se integra como un complemento dentro del sistema de valorización. Mientras el reciclaje mecánico sigue siendo la alternativa más eficiente para plásticos limpios y homogéneos, el reciclaje químico permite gestionar materiales complejos, mezclados o contaminados que hoy no pueden procesarse por vías convencionales.

Esta complementariedad permite ampliar el alcance del reciclaje, mejorar la eficiencia del sistema y reducir la necesidad de producir nuevos plásticos a partir de recursos fósiles, con un menor impacto ambiental.

El reciclaje químico y el desafío de avanzar hacia la circularidad en Chile

En Chile, el avance hacia la economía circular está impulsado por marcos como la Ley REP y la Hoja de Ruta para la Economía Circular al 2040, que buscan reducir la generación de residuos y fortalecer su valorización como eje del modelo productivo.

En este contexto, el reciclaje químico representa una oportunidad relevante, especialmente para aquellos materiales que hoy no cuentan con una solución eficiente dentro del reciclaje tradicional. Su desarrollo no reemplaza las soluciones existentes, sino que amplía el abanico de herramientas disponibles para una gestión más integral y coherente con los objetivos de la política pública.

Si bien esta tecnología aún no está ampliamente implementada a nivel local, su evolución refuerza un principio central: avanzar hacia la circularidad requiere combinar innovación, buena gestión, regulación y cambios culturales. No existe una solución única, sino un sistema que articula distintas herramientas.

El rol de la gestión hoy

Mientras estas tecnologías continúan su desarrollo e implementación en Chile, la clave sigue estando en fortalecer la gestión de residuos desde el origen, mejorar la segregación y potenciar las alternativas de valorización disponibles.

En Ecológica, el foco está en acompañar a las organizaciones desde hoy en ese camino, avanzando hacia modelos donde los residuos dejan de ser un problema y se transforman en recursos, acercándose de manera concreta a una visión de cero basura.

Maquinaria industrial procesando pellets plásticos reciclados mediante tecnologías de valorización de residuos.